Por mi edad y por mi comportamiento ético y moral en las importantes funciones que me tocó desempeñar en el sector público y privado, no acostumbro ni necesito hacer alabanzas ni ponderar a ninguna persona, incluyendo políticos, porque no necesito pedir ayudas ni prebendas para enfrentar los gastos personales, ni prebendas para cubrir mis obligaciones familiares.
Aunque como compueblanos confirmo que no he tenido amistad ni relaciones personales con el ing. Estrella y solo lo recuerdo que cuando asistía a una actividad organizada por el periódico elCaribe del cual, como he manifestado en otras ocasiones, fui su primer canillita en mi querido pueblo Salcedo, cuando empezó su primera vez el 14 de abril de 1948.
En la ocasión de arriba señalada conversé con el ingeniero Estrella sobre sus familiares en Salcedo, pues era sobrino de Manuel Estrella, quien fue uno de los primeros farmacéuticos, quien abrió una farmacia al lado de su vivienda, quien hasta recetaba y hacía las veces de médico al servicio de los salcedenses, especialmente de nuestros campesinos; su esposa la distinguida dama doña Lucila se veía diariamente caminar hacia la santa Iglesia a oír la misa diaria con los piadosos Sacerdote padre Javier, padre Cecilio y padre David, quienes durante más de 50 años regentean nuestra parroquia San Juan Evangelista.
Las redes sociales dieron la falsa información de que el ing. Estrella formaba parte del grupo de dominicanos que iban a ser extraditados hacia los Estados Unidos, lo que se hace con los drogadictos o con quienes cometen determinado crimen, lo que gracias a Dios desmintió rápidamente la honorable Procuradora General de la República mi amiga dra. Miriam German, hija como yo de la provincia Hermanas Mirabal.
Sobre esta situación recuerdo que cuando fui seminarista nuestro padre espiritual reverendo padre Fernando Quevedo (FPD), nos contó la historia del sacerdote San Ambrosio, quien recibió una feligrés para confesarse porque, según ella, había cometido el pecado de levantar el falso testimonio a una amiga manifestando que era infiel.
El santo sacerdote le manifestó que podía perdonarla y le pidió que volviera a su casa y regresara con un pollo o una gallina desprendiendo sus plumas y regarlas en el camino recorrido; al llegar nuevamente ante San Ambrosio le pidió el perdón de su pecado y este le respondió regresa nuevamente a tu casa y recoge las plumas que desprendiste al pollo, respondiéndole ella que eso es imposible, respondiéndole el sacerdote; eso mismo sucede con la mentira pecaminosa que hiciste con tu amiga, pues su fama o inocencia te es imposible reponerla.
¿Pero quién es el ing. Manuel Estrella?
Para apreciar su seriedad y los aportes hechos a este país, incluyo debajo algunas pinceladas sobre su comportamiento.
Él es presidente-fundador del Grupo Eestrella grupo formado por: Ingeniería Estrella, contratista de obras civiles y viales; Acero Estrella, líder del mercado en construcciones metálicas, y Consorcio Minero Dominicano, propietario de las marcas Cemento Panam, Concreto Panam y Agregados Panam, que ofertan cemento, hormigón y agregados de elevada resistencia.
Graduado Magna Cum Laude en Ingeniería Civil en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) en el 1983, de Maestría en Administración de Empresas en el 1995 y Maestría en Finanzas Corporativas en 2003.
Como empresario ha diversificado sus negocios adquiriendo participación importante en Multimedios del Caribe, compañía propietaria del periódico elCaribe y las estaciones de televisión y radio CDN, en el Hospital Metropolitano de Santiago, en el Aeropuerto Internacional del Cibao, en Ferretería Ochoa y en AES Dominicana, proveedora de soluciones energéticas. En la actualidad, preside el Centro Cultural Dominico Americano y también directivas del Cibao Fútbol Club, equipo que representa a Santiago en la Liga Dominicana de Fútbol.
Durante diez años fue profesor en el área estructural del Departamento de Ingeniería Civil de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), institución de la que hoy es miembro de la junta de Directores.
Ha sido miembro directivo de la Asociación de Industrias de la Republica Dominicana, del Consejo Nacional de la Empresa Privada, de la Junta Monetaria del Banco Central, de la Cámara Americana de Comercio, de la Fundación Institucionalidad y Justicia, de Educa y de la Asociación de Comerciantes e Industriales de Santiago, de la que fue presidente por tres períodos consecutivos. Por su liderazgo como profesional y empresario ha recibido distinciones de renombradas entidades.