El pasado miércoles el Partido Revolucionario Moderno (PRM) entregó a la Junta Central Electoral (JCE) un padrón con 3,092,289 afiliados, lo que provocó la reacción de partidos opositores, que denunciaron que sus militantes aparecían inscritos en ese listado.
En víspera de que los partidos políticos organizan sus procesos internos de cara a la contienda electoral del 2024, se comienzan a ver situaciones no esperadas, en una época en la que se habla de la “nueva política”, que parece ser solo cosa de nombre.
El caso más reciente es la supuesta inscripción de altos dirigentes políticos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en el padrón electoral del partido oficial. En lugar de que hablemos de temas prioritarios para el país, como la inflación, la educación y los retos en el inicio del año escolar, la situación migratoria, a la que nos enfrentamos desde hace años con nuestros vecinos; los dirigentes del partido oficial y opositores gastan un valioso tiempo en acusarse unos a otros a través de las redes sociales.
El presidente de la Comisión Nacional de Elecciones Internas del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Deligne Ascención, por ejemplo, sostuvo que la aparición de otros dirigentes políticos en su padrón de electores son “tácticas” para desacreditar al actual Gobierno.
“Ese intento fallido de desacreditar el esfuerzo de miles de hombres y mujeres y de un ejercicio de gobierno que ha fortalecido al PRM en la preferencia del electorado no tendrá éxito, por burdo y falso”, dejó claro el funcionario.
Mientras que José Ignacio Paliza, atribuyó a la “vieja forma de hacer política” la inscripción de altos dirigentes de oposición en el padrón del partido para tratar de socavar su credibilidad y ocultar el gran apoyo mayoritario de la población al presidente Luis Abinader y a la organización política.
En noviembre del pasado año, el equipo del candidato presidencial del PLD, Abel Martínez, había denunciado la aparición de este en el padrón de la Fuerza del Pueblo (FP) y luego de las críticas la JCE se desligó del uso que les dan los partidos a sus respectivos padrones.
El trabajo que hace el órgano electoral, al confrontar y cruzar los padrones de miembros inscritos en cada una de las agrupaciones políticas es valioso. De ese escarceo depende una parte del éxito del proceso del 2024. Llegado el momento veremos la realidad de los números, unos esperan conquistar 2 millones de votantes, otros un poco más.