La Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de hacer una nueva reclasificación de los grupos de edades y ha eliminado el correspondiente a la Tercera Edad que se hizo famoso y de un acostumbrado uso desde que en 1989 el entonces CONES autorizó el Programa Universitario de la Tercera Edad (Paputed) bajo la rectoría de la Universidad Eugenio María de Hostos (Uniremhos) de la que fui cofundador y su primer Rector, convirtiéndose ese programa en la que hoy es la Universidad de la Tercera Edad (UTE), autorizada mediante el Decreto No. 56-92 de fecha 26 de febrero de 1992 para expedir títulos académicos con el mismo alcance, fuerza y validez que las expedidas por las instituciones académicas oficiales o autónomas de igual categoría existentes en el territorio nacional. La OMS estableció los grupos de jóvenes y edad mediana de la siguiente manera:
1. Menor de 0 a 17 años;
2. Jóvenes de 18 a 65 años;
3. Edad media de 66 a 79 años;
4. Anciano de 80 a 99 años;
5. Mayores de larga vida, más de 100 años.
El decreto No. 56-92 que autorizó a la UTE estableció como edad de ingreso en 40 años para su primer matriculación, que se consideró elevada para grupos de edades existentes en el país, razón por la cual se redujo esa edad de ingreso, mediante los decreto 240-94 y 960-2000 del Poder Ejecutivo a 25 años de edad que reunieran los siguientes requisitos tales como:
a) Tener una familia organizada y que sea cabeza de hogar;
b) Presentar una certificación de los lugares donde trabaja, sea en el sector público o privado.
c) Cualquier otro documento que permita a la UTE determinar que se trata de una persona cuya labor le impida asistir diariamente a la Universidad.
Hace algunos años los países de la Unión Europea crearon la denominada ¨Educación Intergeneracional¨ a la que concurrían los abuelos, los padres, los hijos y nietos cuya experiencia ha sido extraordinaria al evaluar la participación altamente positiva de este variado grupo de adolescentes, así como adultos jóvenes y mayores de larga vida, el decreto 139-01 de Educación Superior por otra parte, la ley Superior, Ciencia y Tecnológica, terminó en discriminación contra la UTE que estableció un mínimo de 25 años como pre-requisitos para matricularse en la misma al establecerse en su artículo No. 107 lo siguiente: ¨Art. 107. Esta ley modifica cualquier disposición legal que le sea contraria¨.
Partiendo de esta disposición, el Consejo Académico de la UTE dispuso la admisión de estudiantes “a partir de los 23 años”, aunque puede hacerlo con menos edad, pero lo hicimos así para poder mantener la disciplina y nuestro sistema semi-presencial con los participantes que se matriculan en la misma, la cual recoge y actualiza lo aprobado en su artículo No. 12 el reglamento sobre las Instituciones de Educación Superior aprobado mediante el decreto 104 del Poder Ejecutivo que en su artículo 12 establece los requisitos para el ingreso a las matriculaciones educativas de este nivel y en ninguno de ellos fija ni un mínimo, ni un máximo de edad para ingresar a las Universidades Nacionales. Por lo procedente explicado en la presente entrega, estamos proponiendo al Consejo Académico de la UTE la disposición de aceptar estudiantes a partir de los 21 años de edad y dejando para su aprobación a la Rectoría de esta insistir por el Decreto 56-92 del Poder Ejecutivo.