Atendiendo a reiteradas solicitudes de las madres de nuestros niños y adolescentes de la escuela pública, el ministerio de Educación accedió a cambiar gradualmente los uniformes escolares, para hacerlos más cómodos y seguros, sobre todos para las niñas.
Han reclamado durante mucho tiempo las madres que les cambien a las adolescentes las faldas o pantalones a un color más oscuro que el kaki, para que les oculte o disimule las manchas que se les producen cuando las sorprende la menstruación.
Atendiendo esa justa solicitud, el Minerd está cambiando a pantalones azul marino y ha aprovechado para hacer los uniformes más frescos, los polochés con un tejido 65% de algodón y un 35% de poliéster, haciéndolos fuertes y más frescos para asimilar las calurosas temperaturas del verano en clases.
También elevar la cantidad de 600 mil que antes distribuía, a 1.8 millones para arropar ahora a un 100% de los escolares, pues antes lo era sólo un 30%. Ahora se impacta más ampliamente a las familias pobres que envían a sus hijos a la escuela pública.
Nunca cuestioné la construcción de las líneas 1 y 2 del metro del GSD, que hicieran los gobiernos de Leonel y Danilo, y que ahora extiende y amplía Luis Abinader.
Siempre defendí lo valioso de que nuestros pobres de Guaricanos, Villa Mella, Punta, Guanuma y otros sectores de SDN viajaran con dignidad y prontitud, y no que pagaran 3 y 4 pasajes para llegar a sus destinos en transporte infame, lento y caro.
Ahora también defiendo el derecho de nuestras muchachitas pobres a tener buenos uniformes que les guarden su intimidad y las defiendan del bulling y burlas de los machitos violentos que estamos criando.
¿Por qué podemos gastar gruesas cantidades de dinero en los barrilitos, cofrecitos y las enormes millonadas que damos a los políticos a través de la JCE, y no podemos destinar partidas a mejorar el transporte colectivo y los uniformes de nuestros escolares pobres?
¿Por qué no nos rasgamos las vestiduras con los cuantiosos incentivos y exenciones que damos a ricos empresarios, y atacamos la inversión en los pobres?
Como parte del estilo irresponsable con que el pasado PLD-Fupu está haciendo oposición, he visto a comentaristas que lanzan improperios y cuestionamientos sin base al cambio de uniformes de los escolares pobres, el año que viene.
Vi y escuché, tengo el video, que uno identificado como leonelista quiso descalificar los pantalones azul marino porque él se pasó la vida usando pantalones kaki ¡Como si los varones menstruaran, dios mío! Otro se preguntó sobre la escrupulosidad con que se esté administrando el cambio.
Cualquiera que se acerque al Minerd confirmará que el ministro Ángel Hernández y su equipo se están administrando con una honestidad y pulcritud que hasta se pasa.
Lo cual no quiere decir que no aparezca alguien que trate de seguir replicando las viejas malas mañas que se daban allí de muy viejo, pero pudiendo estar confiado el país de que el que meta la pata, será sancionado.