Unificar las elecciones no es una tarea fácil, partiendo de que contamos con un padrón electoral que sobrepasa los 8 millones de dominicanos y la triste realidad de que hay muchos electores que aún no han aprendido a votar, esto sin contar a los que entran en el porcentaje de abstención, que cada vez es más alto.
Son muchas las aristas a tomar en cuenta, pese a que la mayoría de ciudadanos, incluidas fuerzas políticas y sociedad civil, están de acuerdo en que hay que hacer algo para no seguir desangrando el erario con unas elecciones cada vez más caras y frenar la constante ebullición política.
El pasado jueves el magistrado Román Jáquez, presidente de la Junta Central Electoral (JCE), acudió al Congreso Nacional, convocado por la comisión bicameral que evalúa la propuesta de reforma constitucional y que incluye la unificación de las elecciones como uno de los planteamientos a tomar en cuenta.
Antoliano Peralta, consultor jurídico del Poder Ejecutivo, ha señalado que la unificación de las elecciones no está planteada solamente por el costo económico que implican los torneos electorales, la intención primordial del Poder Ejecutivo con esta propuesta es, según el funcionario, tratar de crear un clima de paz y sosiego a una sociedad que se pasa cuatro años en campaña.
Sin embargo, escuchar los argumentos del pleno de la JCE hace pensar seriamente en todos los retos que supone este paso que, para empezar, obligará al elector que de por sí ha manifestado una apatía clara al proceso a manipular cinco boletas, por todos los niveles que deberá votar, lo que a su vez se traducirá en más tiempo para ejercer su derecho al voto. Esta situación de igual manera obligará, según la JCE, a contar con más colegios electorales y mayor tiempo para los escrutinios y por consiguiente para dar resultados.
Estas implicaciones son algunas de las razones que se estudian para entender la favorabilidad de esta propuesta y si ella permitirá seguir fortaleciendo el clima de credibilidad y organización que se logró en los pasados torneos electorales de este año y que redujo los conflictos sociales.
Esperemos que se vea al detalle cada punto para que el resultado de estas consultas que lleva el Congreso se traduzca en acciones favorables no sólo para los ciudadanos, sino también para la democracia dominicana. ¿Estamos listos para el voto electrónico? Es la pregunta que está sobre la mesa.