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A los economistas les toca analizar el impacto que tendría sobre las finanzas del Gobierno el retiro del proyecto de reforma fiscal que había sometido el presidente Luis Abinader, pero hay varias lecturas políticas sobre el manejo del tema de la reforma fiscal, desde la presentación del proyecto, su introducción al Congreso y su posterior retiro. Si bien es cierto que el oficialismo tendría que revisarse porque no logró convencer de que se apoyara la iniciativa, y parece que faltó acoplamiento, por otro lado, la oposición política, aunque ahora aplaude el retiro y una parte de ella se atribuye el “triunfo”, tampoco estuvo a la altura de las circunstancias en sentido general, porque las alternativas brillaron por su ausencia, y no hay mucho mérito en montarse en un tema impopular para enfrentar al Gobierno.
Los que hicieron la tarea
Es válido que la oposición haya querido aprovechar la reforma fiscal para hacerse sentir, porque hasta ahora no había logrado hacerle mella al Gobierno con ningún tema, y ahora estaba frente a una oportunidad de oro, pero las críticas debieron estar acompañadas de opciones, de alternativas, y eso no siempre fue así. Pero felizmente, hubo sus excepciones. Aquí se vio cómo algunos sacaron la cara y dieron muestras de que conocen la forma correcta de hacer oposición en estos tiempos. Juan Ariel Jiménez, del PLD, y Omar Fernández, de la Fuerza del Pueblo, hicieron sus tareas, pero parecen esfuerzos individuales, no necesariamente vinculados a acciones institucionales de sus respectivos partidos.
