El mes de febrero tiene una significativa trascendencia en la historia dominicana, porque enmarca acontecimientos importantes de la emancipación nacional, entre ellos que el 25 de febrero nació el gran patricio dominicano, Ramón Matías Mella, en 1816, hombre que junto a Francisco Sánchez y Juan Pablo Duarte conforma la tríada de los Padres de la Patria.
El lugar especial que la historia le reserva es por haber sido el que disparó el famoso trabucazo que consagró el nacimiento de la República Dominicana.
En lo que respecta a su participación en la lucha independentista, era el mejor preparado como militar y estratega que contribuyó a la expulsión de los invasores haitianos; también su entrega, su compromiso, lo llevó a pelear posteriormente en la lucha por la restauración, porque jamás renunció a sus ideales de independencia y de libertad
Mella mantuvo una conducta sin dobleces y perfectamente clara, intachable, a lo largo de toda su vida.
Esta patria no se hizo sola ni se consiguió por la gracia de nadie, sino que requirió grandes sacrificios, sangre derramada en los campos de batalla, años de lucha y laborioso esfuerzo de insignes dominicanos como Mella, lo que nos permite hoy proclamar ante el mundo que somos orgullosamente dominicanos.
Duarte, Sánchez y Mella fueron artífices, junto a los Trinitarios y lo mejor de la juventud de la época, de la independencia de la República Dominicana, lo que significó el principio de una lucha que se prolongó por varios años, porque no fue una simple declaración estampada en un documento, fue embarcarse en una guerra.
Es precisamente por ello que debemos reverenciar a esas figuras señeras y redoblar nuestro amor a la Patria, y rendir culto a los símbolos que identifican a la dominicanidad.
Rescatar para las nuevas generaciones a Ramón Matías Mella, su cabal honestidad, su pensamiento preclaro y su coraje a toda prueba es un compromiso que debe asumirse desde la escuela, pero también desde los medios con un propósito, que esas recordaciones no se reduzcan a un montón de frases huecas y altisonantes, sino a resaltar al hombre de carne y hueso que fue.
Gloria y loor a Ramón Matías Mella en su natalicio, uno de los responsable de que hoy seamos una patria libre y soberana.