Casi siempre, estudiosos investigadores, contadores de fantasías, y hasta curiosos simplistas, han usado sus ingenios para alumbrar el camino del ignorante con hipótesis que con el paso del tiempo han dejado aun tapada la verdadera historia de los primeros migrantes a las Américas, sobre lo cual solo sabemos que el famoso hispano-genovés acreditado como descubridor realmente no lo fue. Buscaba la bibliografía de las migraciones precolombinas a las Américas cuando me sorprendieron dos títulos que parecen fantasiosos, lo que me hizo leerlos. Ambos tratan de la antigüedad de los viajes chinos a nuestro continente estimados entre mil y dos mil años antes que Colón.
En un artículo de investigación arqueológica escrito por Alejandro Vega Ossorio, quien se identifica como “Director de Noticias Planetarios. Director de la Comisión de Exploraciones Arqueológicas de la Corporación Planetarios. Maestro de la Orden del Cetro”, con el llamativo título “China llegó América más de 1,000 años antes que Colón: la contundencia de la evidencia”.
Discurre así:
“Siempre sostuvimos que la Cultura Olmeca fue mal interpretada y que era en realidad una mezcla artificial hecha por los arqueólogos modernos de varias culturas diferentes que influyeron sobre los indígenas: blancos, asiáticos y hasta negros, que vinieron en oleadas sucesivas a México y al resto del continente americano. Hablaremos aquí de la influencia asiática en América Precolombina es un hecho real, largamente ignorado por la Arqueología oficial. La sola visita al Museo Arqueológico del Distrito Federal en México, o a los Museos de Sitios Arqueológicos como el de Palenque o La Venta, es un ‘paseo’ a través de esculturas que son de estilo netamente asiáticos”.
“Siempre sostuvimos que la Cultura Olmeca fue mal interpretada y que era en realidad una mezcla artificial hecha por los arqueólogos modernos de varias culturas diferentes que influyeron sobre los indígenas: blancos, asiáticos y hasta negros, que vinieron en oleadas sucesivas a México y al resto del continente americano. Hablaremos aquí de la influencia asiática en América Precolombina es un hecho real, largamente ignorado por la Arqueología oficial. La sola visita al Museo Arqueológico del Distrito Federal en México, o a los Museos de Sitios Arqueológicos como el de Palenque o La Venta, es un ‘paseo’ a través de estilo netamente asiáticos”. Efectúa una serie de análisis sobre fotos de objetos arqueológicos para terminar con la afirmación que sigue.
“Luego de los trabajos del Investigador de primera línea Octavio Luis González Calderón en sus dos libros ‘Arte Olmeca y Maya, la Influencia Asiática’ y ‘Los Señores de Jade’ que son una demostración cabal y contundente, seguir ignorando la presencia de pueblos asiáticos, es ser un necio. La obra de González Calderón no sólo abarca una impresionante colección fotográfica de pruebas, sino también un importante Museo privado en la Ciudad de Coatzalcoalcos, Veracruz, México, el cual contiene decenas de piezas sobre la influencia asiática, (y) de pueblos blancos sobre el área Olmeca”.