La senda discursiva del presidente de los Estados Unidos está cargada de epítetos que rebosan los límites de la imaginación de cualquiera auditorio que haya estado acostumbrado a escuchar declaraciones y comunicados hechos por líderes políticos encumbrados que usan lenguajes respetuosos y de amistad, sustituidos por un discurso de insultos y amenazas como lo haría cualquier bravucón abusador y pendenciero en una escuela secundaria de Norteamérica, pero muy impropio del respeto que se espera del presidente de la nación más poderosa del planeta y que más ha promovido la causa de la libertad y el respeto a los derechos humanos. Amenazadas naciones de norte, centro y sudamérica; de oriente medio, de Europa, de Asia. Con destrucción y exterminio totales. La agencia de noticias rusa Sputnik se refiere al caso específico de Irán con el comentario de más abajo:
“En un intento de deshacer el arreglo nuclear que firmaron el 15 de julio de 2015 el Grupo 5+1 (China, EEUU, Francia, Reino Unido y Rusia Alemania) con Irán, destinado a disminuir drásticamente el enriquecimiento de uranio en el país, a cambio del fin de las sanciones, Donald Trump declaró irresponsablemente y sin ningún sustento que aquel acuerdo era “horrible” y dañino para EEUU. Su partidario, el senador republicano Tom Cotton lanzó inclusive la posibilidad de no sólo aplicar sanciones económicas contra Teherán sino organizar una intervención militar si es que el país sigue con su programa de misiles balísticos y armas nucleares.”
“Una cosa son los políticos y otra los militares. Precisamente, los generales no quieren la guerra ni contra Corea del Norte, ni contra Irán. El secretario de Defensa, James Mattis, declaró que Teherán sigue, según los informes de los servicios de inteligencia y los informes de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA), cumpliendo con lo acordado en Austria en 2015. El Jefe del Estado Mayor Conjunto, general Joseph Dunford, y el secretario de Estado, Rex Tillerson, confirmaron también que Irán está “actuando en conformidad con todas las pautas técnicas aceptadas y firmadas en Viena.”
“Lo que no sabe o no quiere saber Trump, debido a la fuerte presión de los cabilderos israelíes o pro-Israel, es que con Irán se repite la misma historia que con Corea del Norte respecto a la energía nuclear. El programa nuclear iraní ‘Átomos para la Paz’ fue promovido por Estados Unidos en 1957 y siguió sin interrupción hasta la Revolución que cambió el país en 1979.
Henry Kissinger fue el cabildero principal de aquel programa firmando un memorándum titulado ‘EEUU-Irán Cooperación Nuclear’, que según aquel siniestro y controvertido personaje iba a traer a las corporaciones norteamericanas más de 100.000 millones de dólares.”
“En 1976, el presidente Gerald Ford firmó una orden que permitía a Irán comprar tecnología norteamericana para extraer plutonio. Posteriormente, se firmó otro acuerdo multimillonario que permitió a Teherán controlar grandes cantidades de plutonio y uranio enriquecidos, lo que dio en realidad un visto bueno para la creación de una bomba nuclear. . .”