Afrontar un cambio de colegio puede convertirse en un momento repleto de ansiedad, estrés e incluso de miedo
Iniciar un nuevo año escolar despierta muchas emociones, ya que es el reencuentro de amigos, nuevos profesores, retomar rutinas y para algunos, el desafío de un cambio de centro escolar, lo que puede convertirse en un momento repleto de ansiedad, estrés e incluso de miedo.
Si bien la vuelta a la escuela es un momento emocionante, lleno de ilusión y expectativas; no es raro que niños y adolescentes experimenten miedos y preocupaciones, por eso es importante acompañarles de la mejor manera posible.
En ese sentido, la psicóloga clínica Rosa Hernández explicó que este cambio puede causar en ellos mucha ansiedad, debido a la incertidumbre sobre quiénes estarán en su círculo social, si serán aceptados, cómo será el sistema educativo, entre otros elementos.
“La ansiedad es una emoción natural, adaptativa y que está presente en los seres humanos, sin embargo muchas veces nos pone en estado de alerta ante una posible amenaza”, manifestó la doctora Hernández.
Además, indicó que “cuando los niveles de hipervigilancia son elevados, se experimentan reacciones emocionales intensas y cambios somáticos que desbordan la capacidad de afrontamiento de quien lo siente”.
En entrevista con elCaribe, la profesional del Centro Vida y Familia consideró que ante esta situación, el rol y acompañamiento de los padres es vital para que esta etapa de transición sea lo menos traumática posible.
Entre los síntomas que nos indican que nuestros hijos están pasando por un estado ansioso frente al cambio del centro educativo, Hernández refirió que en el nivel cognitivo y emocional pueden presentar dificultad para estudiar, tomar decisión, para organizar o planificar, mantener la concentración y atención.
De igual forma, pueden presentar problemas de inseguridad, tristeza, temor para enfrentar situaciones, tener pensamientos negativos sobre sí mismos, sobre los demás y el entorno.
A nivel fisiológico, explicó que pueden padecer de tensión muscular, nerviosismo, sudoración, palpitaciones y molestias en el estómago, así como dificultades respiratorias y dolores de cabeza.
En tanto que a nivel conductual, podrían presentar problemas de insomnio, evitar ir al colegio, intranquilidad motora, quedarse paralizado, entre otros importantes problemas de salud.
Consejos para ayudar al niño a superar el miedo
Lo primero y más importante es mantener la calma, manifestó la terapeuta, quien pidió a los padres no perder la paciencia, ya que “todo ese carrusel de emociones es su interpretación del acontecimiento de cambio”.
También, aconsejó explicarle cuantas veces sea necesario, por qué lo cambiaron de colegio, siempre enfocado en lo positivo. Además, realizar un ritual de despedida del centro de estudios anterior, con sus amigos que ya no verá todos los días y explicarle que su amistad va a perdurar a pesar de no tener el contacto a diario.
“Es importante escuchar sus preocupaciones sin juzgar, esto permitirá reconocer y validar sus sentimientos de manera que pueda desarrollar seguridad sobre lo incierto”, consideró Hernández, y recomendó conversar sobre todos los beneficios que tendrán en este nuevo colegio.
Otro aspecto que deben explicarles, es la oportunidad que tendrán de conocer a otras personas, sobre las nuevas formas de aprendizaje, todo lo que ofrece el nuevo plantel, así como de las actividades extracurriculares.
Rosa Hernández aseguró que una buena idea es visitar el colegio antes de la fecha de entrada e imaginar cómo podría ser ese primer día de clases.
Asimismo, identificar y conversar de otras situaciones similares donde hubo un cambio de escuela y de cómo superó el periodo de adaptación.
”Debemos explicarle al niño o adolescente cuantas veces sea necesario, por qué se está cambiando de colegio o escuela, siempre enfocado en lo positivo”.
Rosa Hernández
Psicóloga