Gracias a la moderna aparatología y métodos de diagnóstico, hoy es posible detectar y tratar tempranamente muchas enfermedades vasculares, incluso cuando no presentan síntomas claros.
En la actualidad, los avances en cardiología han revolucionado la forma en que se diagnostican y tratan las enfermedades cardiovasculares, lo que abre la puerta a una mayor esperanza de vida.
Con la práctica del cateterismo y sus técnicas asociadas, los pacientes pueden beneficiarse de procedimientos mínimamente invasivos que no solo permiten tratar afecciones cardíacas de manera efectiva, sino que también minimizan el daño al músculo cardíaco y facilitan una recuperación más rápida. Especialistas de renombre mundial se reunieron en el Congreso Internacional SOLACI-CACI 2024, donde discutieron los siguientes avances cruciales y su impacto en la calidad de vida de los pacientes cardiovascularmente comprometidos.
- Cateterismo y diagnóstico temprano: La moderna aparatología permite detectar enfermedades vasculares incluso sin síntomas claros, lo que facilita un diagnóstico temprano que es esencial para un tratamiento exitoso.
- Intervenciones mínimamente invasivas: Las técnicas como la angiografía coronaria (examen utilizado para observar las arterias), angioplastia con stent (es una de las formas para tratar las arterias que están obstruidas), y los reemplazos de válvulas cardíacas (como el TAVI) han transformado la manera en que se abordan las enfermedades del corazón, y permiten procedimientos menos invasivos y menos riesgosos.
- Menos daño al músculo cardíaco: En casos de infartos agudos de miocardio tratados a tiempo, la desobstrucción de arterias restringidas permite prevenir el daño significativo al corazón, lo que mejora de manera notable el pronóstico del paciente.
- Incremento en la expectativa de vida: Los avances en cardiología han permitido que la esperanza de vida de los pacientes llegue hasta 100 años, con una calidad de vida razonable, gracias a la efectividad de los nuevos tratamientos.
- Facilidad de repetición de tratamientos: Los procedimientos endovasculares se pueden repetir con facilidad y con un riesgo similar al de la intervención inicial, lo que permite un manejo continuo de las enfermedades cardiovasculares crónicas.
- Reducción de la mortalidad cardiovascular: Gracias a la combinación de diagnóstico temprano, intervenciones efectivas y controles de factores de riesgo, se ha logrado reducir las tasas de mortalidad asociadas a enfermedades cardiovasculares.
- Acceso a tratamientos innovadores: La disponibilidad de medicamentos y tecnología de vanguardia ha mejorado el tratamiento de diversas condiciones cardíacas, lo que contribuye al aumento en la esperanza de vida de estos pacientes.