Durante este tiempo se invita a la oración y reflexión. Los católicos recuerdan la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo
Para los cristianos católicos la Semana Santa es el momento más importante de todo el año. En ella se conmemora en lo que se base su fe: la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
Es una celebración que data desde hace dos milenios. ¿Pero, por qué cambia de fecha todos los años si se recuerda un mismo hecho? La respuesta es sencilla, toda gira entorno al ciclo lunar.
La Semana Santa se celebra el primer domingo de luna llena después del equinoccio de primavera, es por esto que fluctúa entre marzo y abril.
La razón de que se escoja este método para establecer una fecha de la Semana Mayor tiene que ver con que la muerte de Cristo ocurrió cerca de la Pascua judía.
Según se relata en los Evangelios, Jesús realizó la Última Cena, junto a sus discípulos para celebrar la fiesta en la que los judíos recordaban su salida de Egipto. Los judíos, de acuerdo a sus normas, deben renovar cada año esta celebración el día 15 del mes de Nisán, que empieza con la primera luna nueva de primavera.
El tiempo fue pasando y la Iglesia comenzó a unificar la fecha de la Pascua. Según se explica en portales católicos, como ACI Prensa, desde el I Concilio Ecuménico de Nicea en el año 325, la Semana Santa se celebra el primer domingo de luna llena después del equinoccio primaveral en el hemisferio norte y equinoccio otoñal en el hemisferio sur.
El significado de cada día
La Semana Santa es un tiempo de oración, reflexión y encuentro personal con Dios. Inicia el Domingo de Ramos, que conmemora la entrada de Jesús en Jerusalén, y concluye con el Domingo de Resurrección.
Cada día tiene un significado especial e invita a hacer una introspección de cada uno de nosotros. Durante esta semana, la Iglesia realiza diferentes actividades, siendo el Jueves, Viernes y Sábado Santo, denominado Triduo Pascual, los días más importantes.
Lunes Santo. Este día es también llamado “lunes de autoridad”, pues Jesús se manifiesta ante el pueblo y realiza la purificación del templo expulsando a los mercaderes.
Martes Santo. En el “martes de controversia,” se hace alusión a cuando Jesús se enfrenta con los líderes religiosos de su tiempo, entre ellos sacerdotes, ancianos y fariseos, quienes cuestionaban su poder y autoridad para predicar y hacer milagros.
Miércoles Santo. Este día es de penitencia, ya que se está en las vísperas de pasión de Jesús.
Jueves Santo. Se recuerda la actitud servicial de Jesús al lavar los pies a sus discípulos, así como la Última Cena.
Viernes Santo. Es un día de luto. Se conmemora la pasión, crucifixión y muerte de Jesús. En este día, en el mundo entero, no se oficia misa, sino una celebración de la palabra.
Sábado Santo. Es el día de la espera. En la noche se realiza la Vigilia Pascual, en la que se celebra el misterio del triunfo de Jesús sobre la muerte. Es considera la misa mayor de todas las misas.
Domingo de Resurrección. Día de júbilo para los cristianos, pues se recuerda la resurrección de Cristo, un aspecto fundamental de la fe. En las misas de este día se renuevan los sacramentos del bautismo y la confirmación.
El significado de la Semana Santa
Para el padre Wilfredo Montaño, “Semana Santa es un encuentro con Dios. Un tiempo para buscar la santidad y saber que Dios está en mi vida, en mi deserción y en mi fracaso. En todo lo que es mi vida, Dios está ahí, y me invita a la santidad, me invita a dar el paso, a reconocer, a la reconciliación y me invita a un apartado”. Montaño hace énfasis en que para vivirlo a plenitud, lo adecuado sería sumarse al calendario de fe que ofrece la iglesia, pero si por una u otra razón decides que quieres hacerlo desde el hogar, también puede ser posible.