Miguelina es psicóloga, promotora cultural y escritora. Con sus escritos desea transmitir valores como el autocontrol, la familia, el amor propio y el conyugal, y la lección principal sería que la felicidad no es una lotería, sino el resultado de las decisiones y de tener a Dios en el centro de su vida. Su trayectoria profesional en el área de Recursos Humanos y su trabajo en movimientos de la Iglesia católica, donde imparte charlas espirituales, han influido en su visión sobre la importancia de los valores en la sociedad actual. En entrevista con elCaribe, Guzmán de Deveaux nos habla de su libro “Aquí en la playa”, una novela juvenil que invita a la reflexión sobre decisiones importantes y la construcción de relaciones sólidas basadas en el amor y el respeto. Una obra que también invita a los jóvenes a reconocer la importancia de la castidad, la fidelidad, la fe y el amor conyugal.
¿Qué inspiró la creación del libro “Aquí en la playa” y cuál es el objetivo de esa obra?
La juventud está siendo bombardeada por diversas fuentes: música, redes, amigos, entre otras, para llevar una vida sexual desenfrenada. Aquí en la playa es una novela romántica, divertida y espiritual que busca plantear a los jóvenes el plan que Dios tiene para nosotros en ese sentido.
¿Cómo explora el tema y el sentido de pertenencia en esta historia?
Narra las aventuras amorosas de Johan a lo largo de más de 10 años de su vida y cómo sus decisiones lo van alejando cada día más de la felicidad. En ella vuelco mis valores, principios y creencias más firmes aun cuando estas pueden ser algo controversiales en este mundo, en el cual estamos luchando contra tantas agendas que buscan destruir la moral del individuo y de la familia.
¿Qué mensaje quieres transmitir a través de esta obra y qué lección esperas que los lectores extraigan de esta historia?
Con la novela deseo transmitir a todos valores como el autocontrol, la familia, el amor conyugal, el amor propio y la lección principal sería que la felicidad no es una lotería, es el resultado de nuestras decisiones y de tener a Dios en el centro de mi vida. Invita a los jóvenes a reconocer la importancia de la castidad, la fidelidad, la fe y el amor conyugal. También, a la reflexión sobre decisiones importantes y la construcción de relaciones sólidas basadas en el amor y el respeto.
¿Cuál fue su mayor desafío al escribir este libro?
El mayor desafío que tuve que enfrentar al escribir Aquí en la playa fue mi inseguridad porque nunca había pensado en la idea de ser escritora, aunque todos esos años escribiendo charlas me fueron formando, sin darme cuenta, en el arte de narrar historias.
¿Qué tanto beneficia a la producción literaria que el Gobierno se interese en la industria cultural?
Cuando el Gobierno apoya las producciones literarias, el mensaje de estas llegará a más personas y también estimulará al surgimiento de nuevos talentos, alejará a los jóvenes de la droga, de la delincuencia y el ocio. El Estado debe velar por que los jóvenes reciban material de calidad que fortalezca sus valores para que ellos puedan mejorar su entorno, en lugar de que su entorno los dañe a ellos.
¿Cómo considera el papel que le atañe a la cultura?
El papel de la cultura en la sociedad es importantísimo. Una cultura centrada en valores determina el comportamiento de la población en las diversas situaciones que todos enfrentamos.
¿La cultura puede aportar a los cambios que están viviendo sus sociedades?
Absolutamente. Mientras más culto es un pueblo, más capaz es de enfrentar los problemas que le sobrevienen de una manera efectiva.
¿Qué haría si pudiera cambiar algo en apoyo para los nuevos escritores?
Me aseguraría de que toda la sociedad conozca las obras de los autores dominicanos, tanto en las escuelas como en los diferentes centros culturales, las ferias de libros y otros eventos literarios que se dan en diversas partes del país.
¿Además de escritora, a qué otra actividad profesional e intelectual se dedica?
Estudié Psicología Industrial en la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña y ejercí esta profesión por más de 30 años, desarrollé mi mayor fortaleza en las áreas de reclutamiento y capacitación de personal en empresas como Barrick, Falcondo, Cutler Hammer y Reid y Pellerano, entre otros. En el 2004 abrí mi propia empresa, Psicología Empresarial MG, destinada a brindar asesoría en temas relacionados con RRHH, con énfasis en la aplicación de pruebas psicológicas. Pero en el 2020 me vi forzada a cerrarla debido a la pandemia. Paralelamente, mi esposo y yo hemos trabajado en diferentes movimientos de la Iglesia católica, a lo largo de toda nuestra vida impartimos charlas espirituales a parejas, adolescentes y niños.
Consideración
El estado debe velar por que los jóvenes reciban material de calidad que fortalezca sus valores para que puedan mejorar su entorno”.
Opinión
Una cultura centrada en valores determina el comportamiento de la población en las diversas situaciones que todos enfrentamos”.