“Todavía se está hablando de mí por lo que pasó con El Pachá. Entiendo que debieron ser así las cosas para yo recibir este apoyo”, fueron las primeras palabras de Margaro, antes de agradecer al presentador de “Pégate y gana con El Pachá” por provocar esta reacción en cadena que, a pesar de las críticas, favorecieron para la salud del humorista.
Su estado anímico ha mejorado bastante al igual que su físico, luego de que los estudios revelaron que sufría de anemia y que tenía la azúcar en 400. “Yo nunca he sufrido de diabetes… pero ya hoy está todo estable”, sostiene el paciente. Dijo que ya no necesita más que pastillas, y que se ha estado tomando unos seis Ensure y ocho sueros diarios. “Tengo 10 días con tratamiento, si no me lo hacen aquí, tendría que irme a Puerto Rico… Yo toso… y nada. Entonces me dicen que tengo una mancha de bronconeumonía que hay que desaparecerla”, indicó en una entrevista con el periódico elCaribe.
Desde que fue internado en la clínica del doctor Antonio Cruz Jiminián, por la habitación 415 han pasado la vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño de Fernández; el ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo; el administrador general del Banco de Reservas, Simón Lizardo; el ministro de Turismo, Francisco Javier García, y los humoristas Juan Carlos Pichardo Jr., Raymond Pozo, Miguel Céspedes, Fausto Mata, Cacheíto y Bolívar Valera (El Boli), entre otras personalidades. Las ayudas no se han hecho esperar; por ejemplo, reveló que Obras Públicas le está construyendo una casa en el patio de un hermano, a través de la gestión de Pichardo Jr.
“Es un verdadero apartamento, diseñado por dos arquitectos. Además, me sacaron una pensión de 25 mil pesos, la Vicepresidenta, desde aquí le encomendó a la hija mía que vive en Nueva York ir a Miami a comprarme un carro”, reveló. El comediante, de 57 años, agradeció también a sus compañeros y colegas que residen en la República Dominicana y en el extranjero por sus constantes llamadas para estar al tanto de su evolución, entre los que mencionó a Cecilia García, Nani Peña, Luis Gil (El Boricua) y Cuquín Victoria.
Disgustado
Así como ha recibido con cariño y agradecimiento las visitas, donaciones y llamadas de quienes se han preocupado por su estado de salud e internamiento, el cual terminaría la tarde de ayer tras más de una semana hospitalizado, José Nicolás Díaz Cabrera, nombre real, no duda en expresar su disgusto con otros colegas. Indicó que ha extrañado la presencia de Irvin Alberti, Luis José Germán, Kenny Grullón, Víctor Taveras, Carlos Sánchez y Liondy Ozoria. “Tampoco han venido todos esos que tú no sabes si son comediantes o destalentados”, dijo.
Resaltó que del montaje La Escuelota, que se presentará el 20 y 21 de este mes, solo le han visitado Phillip Rodríguez y el productor de la obra, quien fue a anunciarle que su “supuesta muerte” generó la venta de tres nuevas funciones.
Agregó que hubo uno que fue a verlo y le dio “200 pesos y un condón”, otro le dijo, desde la puerta: “Margaro, ya pasamos” y se marchó; mientras que un tercero expresó que había ido a verlo y a darle 70 mil pesos y “ese por aquí no ha venido”. “Correa vino para una transmisión del Sol de la Mañana, la única pregunta que me hicieron fue que cuántas tarjetas del gobierno tengo. Les dije que no tengo ninguna. Ahí terminó la entrevista y se fajaron a discutir entre ellos”, agregó.
Pedía 25 pesos para poder comer
Margaro es el director de aplausos y quien encarna al personaje “El Gladiador” en “Pégate y Gana con El Pachá”, donde gana RD$ 500 por nómina y el extra “que pueda lograr” del animador dominicano al terminar cada sábado el programa en Color Visión. Reveló que le sorprendió al enterarse que algunos aseguraban que gana 125 mil pesos en este espacio, cuando su realidad era pedir dinero para comer. “Yo estaba pasando hambre en Herrera. Yo pedía hasta 25 pesos para comprar dos panes y un mabí”, confesó. El comediante narró que les encomendó a sus tres hijos que se fueran a New York, pedidos por su progenitora, quien supuestamente lo abandonó y “se casó con un norteamericano para legalizar su estadía en Estados Unidos”. Mientras tanto, él reside en lo que denomina “el cuarto de los regueros” de la casa de su hermano, en cuyo patio, ahora construyen su nuevo hogar. Margaro, quien es pentecostés adventista, nació en Puñal, Santiago, en noviembre de 1961. “Un día Salí de Santiago para ‘Cuánto vale el show’. La oficina no apareció y vino Víctor Reyes y me llevó a ‘Sabidísimo’ y de ahí me fui solo. Me iba de ahí para ‘Cuánto vale el show’, luego al ‘Show del mediodía’, a Perdone la hora, de ahí pa’ donde Freddy y ‘El gordo de la semana’. Hoy nada más estoy con El Pachá y en ‘Dime a ve’”, detalló.
