Esta semana será crucial para la Junta Central Electoral y el Tribunal Superior Electoral, tras la designación de Román Jáquez Liranzo como presidente de la entidad organizadora de comicios, su salida de la Alta Corte y su posterior sustitución de la misma.
El magistrado Jáquez Liranzo fue electo por el Senado, junto a otros cuatro miembros de la JCE, para el periodo 2020-2024, quedándole aún 9 meses a la actualgestión del TSE, lo que plantea una serie de cambios que implicará necesariamente la convocatoria al Consejo Nacional de la Magistratura.
La Ley Orgánica del CNM 138-11 establece que en caso de renuncia, el Consejo deberá reunirse para elegir a su sustituto. “En todos los casos en que por muerte, inhabilitación, renuncia o haber alcanzado la edad de retiro, uno o más jueces, el Consejo Nacional de la Magistratura deberá reunirse siguiendo el mismo procedimiento señalado en la presente ley para elegir a las o los sustitutos”, señala el artículo 37 la citada ley.
El suplente del magistrado Jáquez Liranzo (en tanto se convoque el CNM), es Marcos Cruz hasta julio del 2021, cuando termina el período de cuatro años de la actual gestión del TSE.
Sin embargo según supo elCaribe los jueces titulares del TSE Rafaelina Peralta, Santiago Sosa, Cristian Perdomo y Ramón Arístides Madera Arias, estarían inclinados en que el Consejo sea convocado en lo inmediato para definir la presidencia de esa corte y así evitar que un suplente permanezca como presidente en lo que resta de la gestión.
Sería hasta julio del próximo año cuando deberán ser reemplazados o confirmados todos los magistrados del TSE.
A la fecha Jáquez no ha presentado su renuncia de la Alta Corte ante el CNM. Será juramentado junto a los nuevos miembros de la JCE, Dolores Fernández, Samir Chami Isa, Rafael Vallejo y Patricia Lorenzo, el próximo miércoles en el Senado de la República.