La Jornada 34 de LaLiga tendrá hoy la posibilidad de ver al Real Madrid coronarse si se combina su triunfo con una derrota o empate del Barcelona, que defiende el subliderato ante Girona… y algo más. El Barcelona, por historial, potencial y costumbre es el principal club del futbol catalán.
Tanto es así que es inverosímil imaginar que no fuera el equipo de la región mejor clasificado al acabar un campeonato de Liga. Y esa posibilidad es hoy una amenaza real, por primera vez desde hace 82 años. El Girona, al que visita este sábado, está en condiciones de lograr una hazaña que sería tan histórica para el club rojiblanco como desastrosa para el azulgrana.
Y es que este derbi de nuevo cuño, entre dos rivales cuya relación es (de momento) más que amistosa, no es un partido cualquiera para el Barça, que aunque ya se despidió del título y tiene asegurada su presencia en la próxima edición de la Champions, se juega su participación en la Supercopa de España de 2025, un título menor en cuanto a importancia deportiva.