Ejecutivos del equipo señalaron el jueves que el abridor dominicano presentó una inflamación de hombro derecho durante su programa de lanzamientos de pretemporada en mediados de enero. Salazar regresó al montículo, pero sigue estando varias semanas atrás.
“La cosa en que nos estamos centrando es en asegurarnos que Danny esté listo para contribuir por la mayor parte de la temporada de la manera en que sabemos que es capaz”, dijo el gerente general Chris Antonetti. “Si eso ocurre en el primer día de la temporada, grandioso. Si es después, está bien. Creo que queremos asegurarnos de ver las cosas a largo plazo y tratar de obtener lo máximo de Danny por la mayor parte de la temporada”.
El desempeño de los lanzadores ha sido una de las fortalezas de Cleveland, el equipo con más victorias (196) en las Grandes Ligas en las últimas dos campañas. Los Indios encabezaron las mayores en efectividad (3.30) y blanqueadas (17) en 2017 con una rotación que tuvo al frente a Corey Kluber, dos veces ganador del premio Cy Young, y que contó además con el venezolano Carlos Carrasco y Trevor Bauer.
Josh Tomlin y Mike Clevinger ganaron al menos 10 juegos cada uno al registrar mínimo 20 aperturas el año pasado, y Clevinger fue uno de cinco abridores de los Indios que promediaron al menos 10 ponches por cada nueve innings.
Salazar, de 28 años, ha presentado problemas de hombro y codo en las últimas dos temporadas y el año pasado se vio limitado a 103 innings.
“Danny puede ser un lanzador especial, y esperamos con ansias para cuando pueda reincorporarse a la rotación, pero tener esa profundidad al comienzo es enorme”, declaró el coach de lanzadores Carl Willis, que regresó a los Indios este invierno después de tres temporadas en la misma función con Boston.