Cleveland, Ohio, Estados Unidos.- Una corona en una corrida histórica de 16-0 es lo que buscan los Warriors de Golden State esta noche en el Quicken Loans Arena, la casa de LeBron James que ellos profanaron con un impresionante cierre en el tercer partido de la serie final NBA.
Esta noche, a las 9:00, es el cuarto encuentro de este enfrentamiento que Golden State tiene a su favor 3-0. Ningún equipo en la historia de la liga estadounidense ha regresado jamás de ese déficit.
Cleveland logró una pletórica gesta al reponerse de una desventaja 1-3 durante la final pasada (2015-16) frente a este mismo rival, pero esta vez las cosas lucen muy diferentes, especialmente con la presencia de Kevin Durant, quien tiene tres partidos por encima de los 30 puntos y una exhibición defensiva que lo candidatean como aspirante a obtener el premio al Jugador Más Valioso (JMV) de esta serie.
El propio James lo ha reconocido. Golden State es un hueso duro de roer. “Es probablemente el equipo con más poder ofensivo que he enfrentado en mi carrera”, dijo en conferencia de prensa LeBron, cuya línea de 39 puntos, once rebotes y nueve asistencias en el tercer partido no bastó para detener a los Warriors. “He jugado frente a grandes equipos, pero pienso que ninguno ha tenido este tipo de poder ofensivo”.
Durant, Stephen Curry, Klay Thompson y Draymond Green han jugado a un nivel increíble, así que ahora Golden State se prepara para concluir invicto su marcha de postemporada rumbo a su segunda corona en tres años.
El 15-0 de estos playoffs no sólo es un récord para la NBA, sino que también lo es para cualquier deporte profesional mayoritario en los Estados Unidos (NFL, MLB y NHL).
Los Pinguins de Pittsburgh ganaron 14 en línea en los playoffs de la temporada 1992-93 en la NHL.
La mentalidad de los jugadores de Golden State es terminar el trabajo en Cleveland. Eso fue lo que se apreció durante la conferencia de prensa en la madrugada de este jueves. “Esto no se ha acabado”, apuntó Durant. “El trabajo no se ha hecho. Los juegos para cerrar siempre son duros. Nunca he estado en esta situación de cerrar un juego para ganar un campeonato. Ellos tienen un gran equipo y sus fanáticos son grandiosos, se sintió su energía, pero nosotros vamos a ser mejores en el cuarto juego, falta mucho trabajo por hacer”.
Curry, quien al igual que Durant ha tenido una grandiosa serie, se mostró respetuoso con Cleveland, pero no quiere viajar a la bahía para concluir la misión en su casa, el Oracle Arena. La meta no era terminar con 16-0, pero ahora, obviamente, sí lo es entre los jugadores del equipo californiano. “Queremos eso porque ganamos el tercer juego, pero no porque queríamos el 16-0 por algo histórico”, afirmó Curry. “Nosotros sabemos lo duro de ganar un campeonato y sabemos la importancia que tiene cada juego. Ahora miramos hacia el viernes (hoy) y nos enfocamos en eso y es obvio que queremos el 16-0”.
LeBron, Kyrie Irving, Kevin Love y compañía parecen no tener ajustes que valgan contra Golden State. Los Cavaliers vienen de jugar un buen tercer encuentro en el que anotaron, incluso, 61 puntos, de los cuales hay que destacar 12 triples, en la primera mitad.
LeBron no ha estado a su nivel acostumbrado en los cuartos parciales de estos tres juegos en los que solo ha anotado once tantos y ha lanzado para un 36% desde el campo. “Ellos jugaron bien, defendieron más, rotaron mejor el balón y hasta ganaron muchas pelotas sueltas, pero cuando entras al cuarto parcial con ventaja, en tu casa, en esos últimos minutos y no puedes ganar es muy difícil”, declaró Carlos Morales, destacado comentarista de la cadena Espn. “Lo veo difícil que puedan hacer ajustes porque estas son las clases de derrotas que te tumban anímicamente. Si ellos logran ganar este partido del viernes me quito el sombrero ante ellos, tendrán mis respetos, porque usualmente a un equipo que pierde así le es muy difícil levantarse”, agregó el exdirigente de la selección de baloncesto de Puerto Rico.